Cambiar la cultura no es sólo determinar una misión que contiene palabras de impacto y objetivos vagos, y por supuesto, no es una cosa que se puede hacer en un solo golpe. El cambio cultural es algo adquirido a lo largo del tiempo y es algo permanente, pero para ello es necesario:
1.-Una mirada sincera sobre la situación actual de la organización, con evaluaciones y revisiones constantes. También requiere una visión y comprensión del comportamiento humano.
2.-Coraje de descartar aquello que no funciona y desarrollar procesos que funcionen.
3.-Un sistema de responsabilización, donde el papel y las responsabilidades de cada uno sea bien definido.
4.-Un método de recolección de datos que ayude a la organización a tomar las decisiones apropiadas.
Ahora bien el factor fundamental para concretar el cambio cultural es el liderazgo de la organización, que tenga en mente que siempre es necesario una revisión de estándares de la organización.